Lo que pasa es que no entiendo nada, por qué la gente se define hoy como una cosa, hoy como otra... Ahí está el problema, en que no podemos "ser", así sin más, tenemos que "ser algo" o "ser lo otro", y la gente actúa en consecuencia de eso.
Y ahora a mí solo me quedan cenizas en el fondo de la garganta, como una especie de pánico primitivo. Una sensación seca y agridulce, como una culpabilidad oculta por no saber definirme, por no querer hacerlo, mientras veo cómo el resto del mundo se apaña sin problemas. Yo, soy yo, con "todas mis cosas", y solo por el hecho de lo difícil que me resultaría ¿re-conocerlas? todas, prefiero no definirme como nada. Así que comprendo, pero eso solo me hace sentirme un poco más sola.
El caso es que la gente es demasiado voluble como para "encajonarse" en una palabra solamente...
¿Soy la única capaz de verlo?
No hay comentarios:
Publicar un comentario